lunes, 27 de octubre de 2008

Comida rápida es mala

Si alguien no tuviera idea de quién es Richard Linklater, habría que decirle que a partir de ahora deberia prestar atención a su obra. Es uno de los más talentosos directores norteamericanos. No sólo es el director de Antes del Amanecer y Antes del Atardecer, esas dos películas que derritieron de amor hasta a los más incrédulos, ni el realizador de Waking Life, esa exploración filosófica rebelde y casi introductoria, llevada a imágenes con una animación increíble. Como esto es Estudio Urbano, nobleza obliga, Richard Linklater es el director de Escuela de Rock (el que no la vio, que vaya ya a alquilarla) que en cierto modo, desde algún aspecto, podría considerarse inspiradora del espíritu cuestionador y de la intención de aprender disfrutando que tratamos de propagar desde nuestra casa.

En fin, Linklater es definitivamente un tipo inquieto y muy curioso, amante de los debates existenciales, una persona pensante que entiende y sabe leer como pocos algunos de los problemas que impiden a los seres humanos lanzarse de lleno a la aventura de vivir la vida. Esta vez, con Fast Food Nation, si bien no se distancia de sus aspiraciones críticas y filosóficas (casi siempre se encontrarán en sus filmes grupos de jóvenes que se plantean cómo hacer para que las cosas cambien y el mundo mejore), se mete en una historia densa, y denuncia la feroz cadena de negocios que hay detrás de una empresa que vende hamburguesas al público, una como McDonalds o Burger King, pero con menos años en el mercado, en pleno crecimiento.

La película, además de que tiene una trama fluida, está muy bien contada, desarrolla la narración con varias historias paralelas que se entrecruzan y no necesariamente se cierran. Y en cuento a su estrategia para transmitir mensajes, tiene como punto a favor que deja que sea el espectador el responsable de completar historias e incluso pensamientos que van quedando en el camino; esta propuesta de diálogo entre realizador-espectador es otro aspecto interesante del film. Como info extra, contamos que participan en la cinta, que está basada en un libro que causó bastante revuelo, de Eric Schlosser, unos cuantos famosos dispuestos a aportar en la causa: Ethan Hawke, Bruce Willis, Patricia Arquette y Avril Lavigne, entre otros.

En síntesis, al menos una cosa es segura. Ttras observar en el film el meticuloso seguimiento de cada etapa del proceso, y el largo (y ensangrentado) trayecto que recorre la carne que luego se transforma en la hamburguesa que miles y miles de personas comen cotidianamente en cadenas multinacionales, la conclusión no estará lejana de la sencilla frase que da título a estas líneas.

3 comentarios:

Lucas Efe dijo...

¿Estoy leyendo tan rápido que se me pasa el título de la película? O simplemente no lo mancionaron? ;)

Buscando di con Fast Food Nation. Es esa?

Saludos

Unknown dijo...

Precisamente es Fast Food Nation. Es ésa. Ya está agregado al artículo. Se agradece la atención.

Unknown dijo...

Precisamente es Fast Food Nation. Es ésa. Ya está agregado al artículo. Se agradece la atención.