domingo, 26 de octubre de 2008

Lo mejor y lo peor del Personal Fest


Como todos los años, llega la primavera y con ella el moderno concepto de festivales de música. Personal Fest, en su edición marketineramente llamada "elegante sports", trae una propuesta musical más que interesante y, esperemos, una mejor organización que el año pasado, cuando el pánico en masa invadió al Club Ciudad de Buenos Aires tras una presunta cuchillada en pleno campo.

La música al servicio del evento social y el consumo total. Un problema que se repite en este concepto de propuestas tiene que ver con su target. Probablemente vaya más gente respondiendo a una convocatoria "cool" que porque verdaderamente conozca y pretenda escuchar a las bandas que se presentan. Y es un bajón estar viendo a tu banda favorita al mismo tiempo que la persona de al lado mira para todos lados menos al escenario o manda mensajitos buscando encontrarse con sus amigos. Así, el espíritu rockero de todo recital se diluye y estar ahí puede volverse más tortuoso que fascinante. De todos modos, de más está decir que ese espíritu desapareció íntegramente minutos antes de llegar al campo, cuando ya tuviste que desfilar por decenas de stands de distintas marcas promoviendo sus productos.

Que Personal y sus sponsors hagan lo que quieran. Se agradece la convocatoria a bandas importantes pero no de las más grandes, que quien sabe si pudieran venir si no fuera de ésta manera. Pero por favor, se aclama por favor que esta vez el sonido sea al menos digno. En New Order y Ian Brown 2006 fue un papelón, el año pasado, con Snoop Dogg y el resto de las bandas, también dejó que desear. Si suena bien, al menos, los interesados en escuchar la música y no en hacer sociales van a sentirse satisfechos.

Más allá de los conocidos REM y Mars Volta, reunidos el día fuerte del evento, el sábado 1 de noviembre, de los internacionales hay dos bandas de las grosas, británicas ambas, que prometen deleitar a quien se les anime: Spiritualized y The Jesus and Mary Chain. Los primeros proponen una música que transita ánimos y humores diferentes, que reúne en una misma canción momentos de plácida armonía y furiosa explosión. Quien nunca los escuchó, imposible que no caiga en las redes hipnóticas y voladoras de una banda que tras una separación, cuando no, regresó a los escenarios.

The Jesus and Mary Chain marcó una época junto a otras bandas inglesas que fueron grandes referentes de lo que sería el brit pop de los Oasis, Blur y Pulp. Un rock suave con mucha guitarra y energía, envolvente también, que se mueve al ritmo de sus líderes, los hermanos escoceces Jim y William Reid. Los muchachos de Glasgow, tras terminar con la agrupación en 1999, y participar en el bellísimo proyecto Sister Vanilla, de su hermana Linda, con el disco Litle Pop Rock, volvieron a juntarse el año pasado.

De las argentinas, prestar mucha atención a dos bandas que se están consolidando y empezando a ser más presente que promesas: Bicicletas y Banda de Turistas.

Personal Fest, entonces, este fin de semana, una nueva chance para reunir marketing y música de forma tal que la música, esta vez, no quede tan desplazada y sea la protagonista principal.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola!
la verdad que a mi tambien me parece muy triste esta situacion, pero creo que realmente es una movida de plata y marketing mejor que la del pepsi music y el quilmes rock. en este festival se trae lo mejor internacional, musicos y bandas que si uno no los conoce no los va a escuchar, que obviamente vienen aca, son traidos porque primero tocan en el TIM de brasil, lo cual me parece mas triste aun que argentina no sea tan tenida en cuenta como nosotros pensamos...en fin, no me parece que habria que tirar tanto abajo este festival si no los que son realmente malos y juntan a toda la basura que arruina la musica!

saludos!!